Métodos naturales para revertir la aterosclerosis

Incluso cuando los cardiólogos manejan agresivamente los niveles de colesterol y presión arterial de sus pacientes, millones de estadounidenses continúan sufriendo ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares. La razón es que muchos cardiólogos no abordan la causa subyacente clave de la enfermedad de las arterias coronarias: la disfunción endotelial.

La disfunción endotelial es la causa principal de la aterosclerosis, la obstrucción de las arterias que aumenta el riesgo de ataque cardíaco, accidente cerebrovascular e insuficiencia cardíaca congestiva. Afortunadamente, nunca es demasiado tarde para comenzar a contrarrestar este colapso circulatorio, que a menudo es parte del proceso de envejecimiento.

Una gran cantidad de investigaciones ahora apuntan a varios agentes nutricionales, como los polifenoles del cacao, la granada y la superóxido dismutasa (SOD) biodisponible, que han demostrado mejorar drásticamente el flujo sanguíneo arterial, ayudando a promover la función endotelial juvenil y proteger contra los procesos que dañan las arterias envejecidas.

La importancia de la salud endotelial

Muy pocos médicos discuten la importancia de la salud endotelial con sus pacientes cardíacos. El endotelio comprende la capa delgada de células que recubren las superficies interiores de todo el sistema circulatorio, incluidos el corazón, los vasos sanguíneos, el sistema linfático e incluso los capilares más pequeños. Esencial para una buena salud, el endotelio mantiene la circulación ininterrumpida al permitir que la sangre fluya sin problemas a todas las partes del cuerpo y al participar en el control de la presión arterial. Una de sus funciones más importantes es la liberación de óxido nítrico, que indica a los músculos lisos circundantes de las arterias que se relajen y se dilaten, lo que aumenta el flujo sanguíneo saludable en todo el cuerpo.1

Pero el estrés oxidativo nocivo, como el que se produce en la hipertensión, la hipercolesterolemia, la diabetes, el tabaquismo y el propio proceso de envejecimiento, inactiva el óxido nítrico, contribuyendo así a la disfunción endotelial.2

El daño ocurre cuando la integridad estructural del endotelio se ve comprometida y ya no puede proteger las paredes de las arterias contra la infiltración de colesterol, triglicéridos y lipoproteínas de baja densidad (LDL). Por lo tanto, la disfunción endotelial es uno de los primeros pasos en la creación de aterosclerosis, la acumulación de placa arterial que eleva el riesgo de ataque cardíaco, accidente cerebrovascular e insuficiencia cardíaca congestiva.3

Desafortunadamente, a medida que envejecemos, nuestro cuerpo pierde continuamente la función endotelial óptima. Un estudio de investigación publicado en la revista Gerontology que examinó a personas sanas mostró que la función endotelial disminuye con el aumento de la edad.4 Peor aún, algunas investigaciones han demostrado que el desarrollo de la disfunción endotelial puede comenzar en la adolescencia.5 Los investigadores cardiovasculares creen que el endotelio tiene un “enorme potencial diagnóstico y terapéutico, aunque en gran medida sin explotar”,6 por lo que una mejor comprensión de la disfunción endotelial puede ayudar a prevenir o retrasar eventos cardiovasculares mortales. A medida que los científicos continúan desentrañando las numerosas causas de las enfermedades cardíacas y la aterosclerosis, la importancia de preservar la salud endotelial es cada vez más apreciada.7

Afortunadamente, los investigadores han identificado varios ingredientes nutricionales innovadores que parecen mejorar la salud endotelial. Entre ellos se encuentran el cacao, la granada y una formulación biodisponible de superóxido dismutasa (SOD) llamada GliSODin®. En estudios publicados en revistas revisadas por pares, se ha demostrado que estas sustancias tienen propiedades que protegen contra la disfunción endotelial, mientras ayudan a revertir los marcadores clínicos de placa arterial.

Cacao: Un antioxidante natural que preserva la salud cardiovascular

Siglos antes de que los confiteros europeos procesaran los granos de la planta Theobroma cacao para hacer un dulce que llamamos “chocolate”, el cacao se usaba en México y partes de América Latina en su forma en polvo con fines medicinales. Estudios recientes en revistas médicas han encontrado que el cacao en realidad puede ser cardioprotector, y un nuevo estudio mostró que incluso puede revertir los efectos de la disfunción endotelial al mejorar la dilatación de los vasos sanguíneos.8

El cacao tiene una alta concentración de compuestos de polifenoles, específicamente una clase de compuestos naturales llamados flavonoides. Los científicos han identificado varios flavanoles del cacao, incluida la epicatequina y la catequina, que pueden beneficiar la salud circulatoria. Los flavanoles del cacao mejoran la función endotelial al mejorar la bioactividad del óxido nítrico,9 aumentar el flujo sanguíneo,9 reducir la tendencia a la formación de coágulos sanguíneos,10 reducir la presión arterial moderadamente alta,11 y ayudar a las LDL a resistir la oxidación, lo que puede prevenir la acumulación de placa aterosclerótica en las paredes arteriales.12

Un estudio publicado en el Journal of the American College of Cardiology8 encontró que dar cacao rico en flavonoides a pacientes diabéticos mejoró su función vascular. En un editorial que acompaña al informe de investigación, otro equipo de científicos señaló que el estudio brinda “evidencia considerable de que los flavanoles del cacao tienen un efecto positivo en la salud de las arterias”.13

Los científicos del Departamento de Nutrición de la Universidad de California-Davis también descubrieron que el cacao tiene un efecto beneficioso sobre la salud cardiovascular. Su estudio de 2006 en el Journal of Cardiovascular Pharmacology encontró que "consumir cacao rico en flavonoides y productos a base de cacao puede mejorar la función endotelial tanto en personas sanas y comprometidas como en personas normales". Seis semanas de consumo de cacao aumentaron el flujo sanguíneo hiperémico de la arteria braquial hasta en un 76 % en comparación con los valores iniciales. Además, el consumo de cacao disminuyó los niveles de un marcador sanguíneo asociado con la formación progresiva de lesiones ateroscleróticas, lo que indica protección contra la acumulación de placa peligrosa.14

Una importante investigación de los Archivos de Bioquímica y Biofísica demostró un posible mecanismo bioquímico a través del cual el cacao puede ayudar a preservar la salud vascular. Usando un diseño de estudio cruzado doble ciego, los científicos encontraron que los adultos que consumían cacao demostraron una disminución de la actividad enzimática de la arginasa. Se informa que la inhibición de la arginasa mejora la vasodilatación dependiente del endotelio al hacer que haya más arginina disponible. Por lo tanto, este estudio sugiere que el cacao puede ayudar a promover la dilatación saludable de los vasos sanguíneos y una circulación óptima.15

Un ensayo clínico reciente examinó los efectos del chocolate negro, incluido el cacao líquido, sobre la función endotelial y la presión arterial en adultos con sobrepeso. El consumo de chocolate negro o cacao líquido mejoró la función endotelial y disminuyó la presión arterial. El cacao sin azúcar produjo mayores mejoras en la función endotelial, en comparación con el cacao regular que contiene azúcar. Esto llevó a los autores del estudio a concluir que el azúcar puede disminuir los beneficios del cacao para la salud endotelial y la presión arterial, y que las preparaciones de cacao sin azúcar pueden ofrecer beneficios superiores.16

Estos hallazgos ofrecen un poderoso apoyo para el papel del cacao en el mantenimiento de una salud endotelial óptima.

Granada: Una fruta antigua que puede revertir la aterosclerosis

Los estudios han encontrado que la granada tiene poderosas propiedades antioxidantes que parecen proteger el corazón y los vasos sanguíneos.17 El jugo de granada puede tener propiedades antiateroscleróticas, lo que ralentiza la progresión de las placas arteriales.18 Los resultados más prometedores pueden ser los estudios que muestran que el jugo de granada mejora isquemia inducida por estrés en pacientes que ya tenían enfermedad cardiovascular y aterosclerosis.19 La granada incluso muestra beneficios en la reducción de la presión arterial sistólica.18 Las punicalaginas, los taninos y las antocianinas son los principales componentes de la granada que son responsables de sus beneficios antioxidantes y para la salud cardiovascular.

Uno de los mecanismos clave de la granada para apoyar la salud cardiovascular es su capacidad para modular la actividad del óxido nítrico. En las células endoteliales, la granada mejora la bioactividad de la óxido nítrico sintasa, una enzima que genera óxido nítrico.17 Los efectos antioxidantes de la granada también ayudan a proteger el óxido nítrico contra la destrucción oxidativa, asegurando así su disponibilidad para las funciones esenciales de protección de los vasos.20,21

En un pequeño estudio controlado publicado en la revista Clinical Nutrition, 10 pacientes con aterosclerosis y estenosis de la arteria carótida (estrechamiento de las principales arterias del cuello que suministran sangre al cerebro) pudieron revertir los efectos de la aterosclerosis carotídea al complementar su dieta con jugo de granada todos los días durante un año. La aterosclerosis de la arteria carótida (medida como el grosor de la íntima-media carotídea) disminuyó en un notable 30% en aquellos que consumieron jugo de granada diariamente, mientras que aumentó en un 9% en pacientes que no consumieron jugo de granada. En aquellos que consumieron granada, el estado antioxidante total aumentó en un 130 %, mientras que los niveles séricos de LDL en estado oxidativo basal y la susceptibilidad a la oxidación de LDL se redujeron significativamente, en un 90 % y un 59 %, respectivamente. La presión arterial sistólica se redujo en un 12 % después de un año de consumo de jugo de granada, pero no se redujo más después de dos años adicionales de consumo de jugo de granada. Los investigadores sugirieron que la mejora en la salud cardiovascular de los pacientes “podría estar relacionada con las potentes características antioxidantes de los polifenoles del jugo de granada”.18

Un estudio publicado en el prestigioso American Journal of Cardiology también demostró los beneficios del jugo de granada en personas con aterosclerosis. En un estudio doble ciego, aleatorizado, controlado con placebo, 45 pacientes con enfermedad coronaria estable que sufrían de isquemia inducida por estrés (suministro sanguíneo reducido al músculo cardíaco causado por aterosclerosis de las arterias coronarias) fueron asignados al azar a beber jugo de granada (ocho onzas diarias) o un placebo cada día. Los participantes se sometieron a varias pruebas de diagnóstico cardíaco al principio y al final del ensayo. Después de tres meses, el grado medible de isquemia inducida por estrés disminuyó en el grupo de granadas, pero aumentó en el grupo de control. Este beneficio se observó sin cambios en los medicamentos para el corazón, el azúcar en la sangre, la hemoglobina A1c o el peso. Los investigadores concluyeron que el consumo diario de jugo de granada puede mejorar la isquemia miocárdica inducida por estrés en pacientes con enfermedad coronaria.19

Estos estudios demuestran que la granada ofrece importantes beneficios para la salud cardiovascular en pacientes que ya padecen aterosclerosis y disfunción endotelial, y sugieren que la granada puede ayudar de manera similar a preservar el bienestar cardiovascular en personas sanas.

SOD: El propio antioxidante del cuerpo

Una de las enzimas más importantes del cuerpo, la superóxido dismutasa (SOD), fue identificada por científicos hace solo 40 años.22 La SOD es la principal enzima antioxidante que proporciona el primer paso enzimático del cuerpo en el sistema de defensa contra el estrés oxidativo. Como agente antioxidante y antiinflamatorio natural, SOD mantiene la salud celular al activar la reparación celular. Lo que es más importante, la SOD desempeña un papel fundamental en la protección de los tejidos contra el daño causado por el estrés oxidativo al eliminar o neutralizar el radical superóxido que se ha implicado en muchos estados patológicos, incluidas las enfermedades inflamatorias, las enfermedades cardiovasculares y neurodegenerativas y el cáncer.23

Un estudio publicado en la revista Circulation en 2002 encontró que en pacientes con insuficiencia cardíaca crónica, la actividad de SOD unida al endotelio se redujo sustancialmente. Los niveles reducidos de SOD estuvieron estrechamente relacionados con un aumento del estrés oxidativo vascular, que contribuye a la disfunción endotelial en la insuficiencia cardíaca crónica.24

SOD también tiene importantes cualidades antienvejecimiento. Los ratones que carecen de una forma de SOD mueren por estrés oxidativo a los pocos días de nacer25 y los criados sin un segundo tipo de SOD son muy susceptibles a problemas relacionados con la edad, como cataratas.26 Desafortunadamente, los niveles de SOD disminuyen a medida que envejecemos, lo que reduce nuestra defensa contra los radicales libres. justo en el momento en que aumenta la actividad de radicales libres del cuerpo.27

Por lo tanto, tiene sentido que los científicos busquen una manera de aumentar los niveles de SOD en el cuerpo para poder beneficiarse de este importante antioxidante.28 Los científicos de alimentos descubrieron que ciertas especies de melón contenían naturalmente altos niveles de SOD. Sin embargo, la suplementación con este extracto de melón no logró aumentar los niveles de SOD en el cuerpo porque los ácidos y las enzimas en el sistema digestivo descomponen la SOD antes de que pueda ser asimilada por el cuerpo. Después de muchas pruebas y errores, los científicos combinaron la SOD con la proteína gliadina del extracto de trigo para crear un sistema de administración eficaz por vía oral llamado GliSODin® que es capaz de aumentar los niveles de SOD protectora del cuerpo. Esta nueva forma biodisponible de SOD pasa intacta a través del estómago, luego continúa hacia los intestinos, donde se absorbe en el torrente sanguíneo.

Un estudio clínico confirma la capacidad de GliSODin® para brindar protección antioxidante al cuerpo. Durante 28 días, los científicos suplementaron a los animales con SOD de melón estandarizado o con extracto de SOD de melón estandarizado combinado con gliadina (GliSODin®). Los dos grupos fueron evaluados para varios biomarcadores de estrés oxidativo. Los animales suplementados con GliSODin® mostraron una elevación significativa en la actividad de la enzima antioxidante circulante, correlacionada con una mayor resistencia de los glóbulos rojos a la hemólisis (ruptura) inducida por el estrés oxidativo. Por el contrario, los animales suplementados con SOD de melón solo no mostraron cambios en su nivel de protección antioxidante.29

Otro estudio demostró poderosamente los efectos protectores de GliSODin® sobre el sistema cardiovascular. Un grupo de médicos de una sociedad de medicina preventiva en París administró GliSODin® a adultos de 30 a 60 años con riesgo de enfermedad cardiovascular según factores genéticos, química sanguínea, presión arterial, índice de masa corporal (IMC) y antecedentes de consumo de cigarrillos. de fumar. Sorprendentemente, los médicos encontraron que dos años de suplementación con GliSODin® en realidad revirtieron la acumulación de placa aterosclerótica en las arterias carótidas, según lo determinado por mediciones de ultrasonido del grosor de la íntima-media carotídea. Además, la suplementación con GliSODin® aumentó la capacidad antioxidante en los sujetos.28

Juntos, estos hallazgos sugieren que GliSODin® puede ofrecer una estrategia práctica para mantener niveles juveniles de SOD protectora a medida que envejecemos, lo que puede ayudar a prevenir e incluso revertir la disfunción endotelial y la aterosclerosis.

Conclusión

Preservar la función endotelial óptima es esencial para mantener un flujo sanguíneo fluido a través de las arterias y prevenir la acumulación de placa aterosclerótica que puede contribuir al ataque cardíaco, accidente cerebrovascular y otras enfermedades cardiovasculares. Se ha demostrado que las potentes fuentes de antioxidantes naturales como el cacao y la granada mejoran la salud cardiovascular. En algunos estudios, se ha demostrado que la granada y el cacao limitan o revierten la aterosclerosis, reducen la presión arterial alta y mejoran la función endotelial en personas con los problemas arteriales más graves, incluidas enfermedades cardíacas y diabetes. Los científicos continúan investigando la superóxido dismutasa, el poderoso antioxidante del cuerpo. Ahora que está biodisponible como GliSODin® para complementar los niveles en declive natural del cuerpo, existe otra poderosa estrategia antienvejecimiento para mantener una función endotelial saludable y ayudar a prevenir o revertir la aterosclerosis.

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